River: Sangran por la herida

Aguilar atacó al plantel y los jugadores reaccionaron con bronca porque lo hizo en público y no en privado, pero le dieron la razón al presidente, que ayer salió a suavizar su duro mensaje.


Cómo no va a estar enojado? Si estamos últimos...". Las fuertes palabras que dijo José María Aguilar el martes a la tarde retumbaron ayer en el vestuario del predio de Ezeiza. El plantel no armó una charla grupal para tocar el tema, pero sí corrió de boca en boca el mensaje del presidente, ese hombre "enojado porque ellos (por los jugadores) no se enojan", ese dirigente que avisó que "este asunto no puede resultar gratis". Los futbolistas se sintieron tocados por la declaraciones, aunque hubo una mezcla de aceptación de lo dicho con bronca porque fue en público y no en privado."Es lógico que Aguilar esté con bronca porque nosotros somos los responsables de este momento", fue una de las conclusiones que se escuchó por lo bajo. "Pero hubiera sido mejor hacerlo puertas para adentro", reclamó el mismo futbolista que prefirió evitar que esta historia siguiera a través de los medios. La mayoría del plantel optó por el off de récord para transmitir sus sensaciones. Sólo tres dieron la cara: Quiroga, quien reconoció que no respondieron a las expectativas (ver "No estuvimos..."), Abreu, quien pidió diálogo privado y no quiso meterse demasiado en el tema "porque no estuve en el torneo", y Cabral, quien resumió el pensamiento generalizado. "No coincido con eso de que no nos enojamos porque yo me voy muy fastidoso y atrás mío hay una familia que sufre. Mi mujer sabe que no me tiene que hablar cuando vuelvo de la cancha porque estoy caliente por haber perdido. No es ir, jugar y nada más. En eso, no coincido", opinó el zaguero en Un buen momento, por La Red.Los jugadores se reconocen como los responsables del mal momento y hasta admiten que cualquier adversidad los bajonea y es motivo para que sientan que no podrán revertirla. "Hoy nos hacen un gol y sabemos que es casi imposible dar vuelta el partido", reconoció Cabral. Por eso, en las respuestas a las declaraciones de Aguilar, más allá de diferenciarse, los futbolistas no buscaron plantear una guerra que transforme al Monumental en un cabaret. Es más, el propio presidente trató de enfriar sus palabras. "Fue una invitación a la reflexión, no un reto. Defiendo y acompaño a los jugadores, especialmente en los momentos complejos. No pasa por enojarse y pegarse la cabeza contra la pared de un vestuario, pasa por enojarse y romperla en la cancha", fue la traducción que hizo JM en el programa Indirecto, de TyC Sports. "Enojarse es rebelarse. Apunto a eso. A la rebelión frente a la adversidad, a que entendamos lo que estamos viviendo. No es lógico que me quede mudo ante una situación inédita para el club", agregó.¿Cómo seguirá esta historia? Por supuesto, las consecuencias las pagarán los jugadores que no formarán parte del plantel de Gorosito, con Tuzzio a la cabeza. Aunque ningún dirigente da nombres propios, el capitán es el más apuntado. Atrás lo siguen Ahumada, otro al que quieren sacar del grupo, Ponzio y Rosales por una mezcla de bajos rendimientos y "contratos europeos", y jugadores que tuvieron poca participación como Barrado, Gerlo y Merlo, entre otros. Sin dudas, ellos fueron los más afectados por los dichos del presidente y por la trascendencia (negativa) que tomaron sus nombres. Sin embargo, como táctica dirigencial, la que encaró Aguilar no parece ser la mejor opción, ya que la cotización de esos futbolistas ya es menor a la que podían llegar a tener.En sus siete años como presidente, nunca JM había tenido una actitud similar frente al plantel. Claro que nunca River había estado último, aunque sí vivió muchos fracasos y duras eliminaciones en las copas, como en la última Libertadores, que podrían haber sido motivo para patear la puerta del vestuario. Tal vez tarde, pero esta vez sí llegó el día en que Aguilar se plantó, cansado de los "líderes de escritorio" y parece que pasará factura.¿Será el punto final para cambiar la historia? "Podemos estar peor. Por ejemplo, si perdemos con Estudiantes. Por eso sería bueno terminar con una victoria", sintetizó Cabral.

Matias